Volver a ver – Pedro Roth (2013)

Texto Curatorial I en español

COPIAR DIBUJOS

Siempre me pareció redundante cuando se califica a un artista de polifacético ya que es casi un requisito del arte contemporáneo. Sin embargo, quiero resaltar la condición de fotógrafo y artista plástico en Pedro Roth porque es ahí donde encontramos el germen de esta muestra.

La fotografía nació para ser reproducida, de hecho uno podría decir que la fotografía es reproducción. Por otro lado, nos encontramos con las pinturas o dibujos que son obras en tanto son piezas únicas.

La operación que realiza Pedro Roth especialmente para la muestra en el La Sinagoga de Jerusalem en Praga es tomar dibujos de sus distintas épocas, reproducirlos a través de una fotocopiadora y presentarlos como una obra distinta en las cuales el soporte, el tamaño y en algunos casos el color, son modificados. 

Para decirlo de otra manera, el artista esta realizando un ejercicio de memoria y recordación, trayendo del pasado algo al presente, y de la misma forma que pasa con los recuerdos estas “obras recordadas” no son exactamente iguales a las que se hicieron en un principio; modificando el aquí y ahora planteado por Walter Benjamin.

Esta selección de trabajos, unificados por la reproducción, constituye una nueva red de sentido que interactúa con la fuerte carga simbólica del lugar en que se exponen. Justamente, teniendo en cuenta esto, observamos dos intervenciones: una será en las paredes y paneles de la sala y la otra será la construcción de un rollo con los dibujos pegados entre sí haciendo alusión clara al libro de los libros, como metáfora de las infinitas posibilidades creativas del hombre produciendose una lectura diferente por el orden en que se presentan las imágenes. 

Intuyo que no es el deseo de Roth provocar una discusión teórica acerca de la reproducción de las obras de arte. Como artista, observador de su tiempo, él produce un acontecimiento en sintonía con el contexto y su mirada, y que es a su vez la representación corpórea de “una idea”. Es justamente la posibilidad de generar estos pensamientos lo que hace de Pedro Roth un artista necesario e inconfundible.       

Elio Kapszuk